Puede ser que nos perdamos en un mar de conceptos nuevos que se relacionan mucho pero que no son lo mismo.
Todos tienen que ver con el marketing, la comunicación de marcas, la publicidad, las redes sociales, las ventas.
Es normal que se nos haga esta ensalada mental. Constantemente están surgiendo nuevas formas de comunicar, de vender, de conectar con nuestro público. Y los límites están desdibujados. Y encima ¡casi todos están en inglés!
Es por eso que el lado maestra Ciruela de mi mente le pareció bien empezar por lo básico. “Brand” en inglés significa “marca” y la terminación en “-ing”, cuando no es un adjetivo, convierte la palabra en verbo gerundio. Entonces podemos decir, en caso de querer hacer una traducción literal que branding significa “marqueando” o “marquear”.
Pero, más allá de esta explicación, branding es el conjunto de elementos y acciones que identifican a una marca, que la hacen única, fácil de identificar y diferenciar en el océano de competidores que es el mercado.
Esta diferenciación es el resultado de un conjunto de elementos visuales como lo son el logotipo, los colores, el estilo de letras que se utilizan, el estilo de imágenes ya sean fotografías o ilustraciones, el tono de voz, entre otras cosas. Pero también es el resultado de acciones, mensajes y de todo un universo de factores que tiene que ver con las campañas de comunicación y expresión para crear marca.
Branding es la esencia de lo que ofreces.
Como te había contado en el artículo anterior sobre “marca”, branding también es un concepto que se construye en la mente de las personas, no es algo inherente a tu empresa ni algo instantáneo, es algo que se va construyendo con el tiempo.



